HISTORIAS CON SABOR A CAFE 2

Buenos días mis estimados lectores (as), hoy continuare con HISTORIAS CON SABOR A CAFÉ 2, comencemos:

Clodomiro salió del café y se dirigió al parque del pueblo, mismo donde lo esperaba Priscila sentada en una banca, el cielo estaba despejado y la noche había refrescado un poco, pero no lo suficiente, mientras platicaban de temas variados, ella prestaba mucha atención a lo que él le decía y le contó además algunas historias propias y algo que llamo la atención de Clodomiro, es que ella menciono tener un amor especial por los perros – cosa que compartían – , se hacía tarde y al día siguiente había mucho trabajo por hacer, así que él se ofreció a llevarla a su casa, en el camino se entero que la muchacha era hija de un político de peso en dicha población, mismo que era conocido por tener un carácter difícil, carácter que más adelante Clodomiro se dará cuenta que fue heredado por su hija.

Los días siguientes se vieron pocas veces, sin embargo crecía el interés en ambas partes por llevar un paso adelante la relación, y así fue como se dieron las cosas, un día de tantos le tocaba salir de descanso a Clodomiro, por lo cual se fue a despedir de ella, regresaría en 15 días y aunque sus casas no quedaban demasiado lejos, sabía que iba a ser difícil que se vieran durante ese tiempo, ahí ella le comento que le gustaría que se dieran una oportunidad, él sin dudarlo y teniendo en cuenta que a la fecha ella se mostraba como una persona interesante, acepto y comenzaron a “andar” a partir de ese día.

Efectivamente, los días de descanso pasaron y ellos solo se habían visto 2 veces, ella no reclamo nada y lo recibió de buena forma cuando se volvieron a ver, así se fue dando la relación, se veían un momento en las tardes y al anochecer él se iba a dormir a su trabajo, después de un tiempo, llego una noche en que ninguno de los dos se quiso separar, estaba lloviendo y hacia un poco de frio, y pasaron la noche juntos.

A partir de ahí, las cosas cambiaron demasiado, ella lo quería tener siempre a su lado, él le pedía comprensión, el trabajo se le acumulaba y había tardes en las cuales no podía salir del campamento, además su contrato decía disponibilidad de 24 horas y se lo estaban exigiendo cumplir, las cosas se ponían más tensas, ella exigiendo más tiempo, le decía que estaba acostumbrada a hacer lo que quería y que siempre se salía con la suya y que aún conservaba la influencia del papá, él se dio cuenta de donde se había metido, pero era demasiado tarde. Ahora le pedía que se quedara todas las noches con ella, durante un tiempo así fue, sin embargo los estragos de las desveladas y el hecho de tener que cumplir en su tarea como hombre, hacían que Clodomiro, cada día respondiera menos en su trabajo, su hora de entrada era a las 6 am, salía del campamento a las 7 pm y se veía con ella a las 7:30, de ahí se iban a “dormir”, cosa que sucedía entre 1 y 2 am, despertarse a las 5 am, bañarse para ir de nuevo al trabajo y llegar antes de las 6 am, así estuvieron las cosas dos semanas.

Él se comenzó a alejar un poco, físicamente era desgastante ese ritmo de vida, ella al verlo que inventaba muchos pretextos, opto por comprar un celular, mismo que le entregó para que no tuviera nada que inventar y mucho menos no poder contestar. El de mala gana lo acepto, sin embargo seguía buscando pretextos para cuando menos poder dormir en el campamento dos noches a la semana.

Un día, en que se habían quedado de ver y por cuestiones de trabajo Clodomiro no pudo salir del campamento, y mientras acomodaba mucha documentación importante en su oficina, apareció Priscila, con cara de no muy buenos amigos, mientras le explicaba los motivos por los cuales no podía salir, y la invitaba al pasillo – en la oficina, se encontraba su jefe inmediato - , ella se comenzó a comportar de una forma violenta, a reclamar su falta de interés en la relación y a los pretextos que inventaba, no entendía el hecho de que las cuestiones de trabajo eran las que impedían todo eso, cuando Clodomiro regreso a su oficina, Priscila le tiro encima un vaso de refresco, mojando algunos de los papeles que allí se encontraban, él se disculpo con su jefe y la hizo retirarse bajo la promesa de salir más tarde.

Así, fueron pasando los días y Clodomiro no encontraba la forma de quitarse de encima a su “belleza”, misma que ya no soportaba, pues cuando no hacía berrinches por las llegadas tarde, tiraba las cosas al suelo, o no lo dejaba dormir, y llegaba a romper cuanto encontrara en su camino incluyendo el celular que le había dado a Clodomiro, él se dio cuenta que eso no era normal, desgraciadamente no había lugar en el pueblo donde se pudiera esconder y ella no lo encontrara y con cada encuentro era un pleito cada vez mayor, mismo que Clodomiro trataba de evitar a toda costa.

Llego el momento de no aguantar más, solo habían pasado 45 días de su relación con la mujer hermosa llamada Priscila, y Clodomiro estaba al borde de la locura, afortunadamente para él, concluía el trabajo en esa zona y lo estaban solicitando en otro lugar, era la oportunidad perfecta para librarse de su tormento.

Su plan no podía ser más perfecto, aprovechando que tenía pensado ir fuera de la ciudad en los pocos días de descanso que tuviera, le dejaría su coche a un amigo, mismo que lo llevaría directamente del campamento al aeropuerto y de ahí lo escondería en su casa, así para cuando ella se diera cuenta de que no estaba, Clodomiro ya se encontraría a muchos kilómetros de ahí, y si por algún motivo lo trataba de localizar, su coche no iba a estar ni en su casa, ni mucho menos en el trabajo. Así todo concordaría y ella se quedaría sin saber bien que paso.

A su regreso, Clodomiro pasaría por su coche y se lo llevaría a su nuevo campamento, ubicado lejos del primero y sobre todo lejos de aquella mujer.

Todo ocurrió conforme a lo planeado, cuando ella le hablo, Clodomiro le dijo que lo habían transferido por culpa de ella, obviamente le dijo que a un lugar mucho muy lejano, ella se puso como loca y lo fue a buscar a su trabajo, sus jefes sabían ya del plan de Clodomiro y le siguieron la corriente, ella no sabía que hacer, así que se fue a casa de él y espero a que regresara, paso la noche en vela afuera de su casa y él jamás apareció, a la mañana siguiente; siguió al hermano pequeño de Clodomiro a su escuela y se metió para jalarlo y preguntarle donde estaba su hermano, a lo que el pequeño contesto lo mismo - lo mandaron fuera del Estado-. Ella le hablo a Clodomiro y le dijo que eso no iba a quedar así, y al parecer así sería….CONTINUARÁ